Ricardo Cachanosky: "El BCRA no está saneado, tiene reservas negativas"
El economista cuestionó la situación del Banco Central y afirmó que el esquema de intervención cambiaria “no tiene nada de liberal”. También advirtió que el país mantiene reservas netas líquidas negativas y depende del respaldo de Estados Unidos para sostener el tipo de cambio.

(CNN Radio Argentina) — El economista Ricardo Cachanosky analizó en Regreso CNN con Pepe Gil Vidal la actualidad económica y las declaraciones recientes del ministro Luis Caputo, con especial foco en la situación de las reservas del Banco Central y la estrategia cambiaria del Gobierno. “Las reservas netas líquidas son alrededor de 16.000 millones de dólares negativos”, remarcó, y sostuvo que, en ese marco, “si el Banco Central vende dólares, por definición está vendiendo dólares que no son de él”.
Cachanosky explicó que buena parte de las reservas declaradas corresponden a compromisos o activos que no son propios del Banco Central. Señaló que dentro de ese stock figuran el swap con China, el tramo activado del swap con Estados Unidos y los depósitos en dólares del sistema financiero. “El cash es en dólares de los depósitos de la gente. El Banco Central los toma como si fuesen propios, pero no lo son”, enfatizó.
El economista también cuestionó la posibilidad de que la Argentina esté cerca de volver al mercado voluntario de deuda. Según dijo, “con un riesgo país de 650 puntos todavía no estás en condiciones de entrar” y, en caso de hacerlo, sería a tasas demasiado elevadas. Aun así, admitió que una baja del riesgo podría ayudar al Gobierno a refinanciar los vencimientos: “Te puede servir para hacer el rollover de la deuda, pero no le cambia demasiado la vida a la gente”.
Cachanosky criticó además la defensa oficial sobre el ordenamiento del Banco Central y la supuesta magnitud del ajuste fiscal. “Si tuviesen en orden el Banco Central, no tendrían reservas negativas”, sostuvo. Y agregó que parte del equilibrio fiscal que presenta el Gobierno se explica por trasladar la deuda del Banco Central al Tesoro mediante los nuevos instrumentos financieros: “Tienen un déficit financiero fenomenal, que esconden renovando intereses permanentemente”.
También cuestionó el manejo del tipo de cambio y el rol de Estados Unidos en el esquema actual. “Este modelo es Trump-dependiente. Si se va Trump, se les cae la política económica”, afirmó. Para Cachanosky, el Gobierno sostiene el tipo de cambio a través de apoyo externo porque no cuenta con los dólares suficientes para intervenir: “Siempre tuvieron problemas para enfrentar vencimientos y recurrieron a distintos mecanismos para conseguir divisas”.
Consultado sobre la consistencia liberal del programa, fue categórico: “Está a años luz. Ningún liberal estaría metiendo el dedo en el mercado de cambios para decir cuál tiene que ser el valor”. En ese sentido, cuestionó la determinación oficial de bandas cambiarias y la intervención permanente: “¿De dónde sacó que el tipo de cambio tiene que ser 1.500 pesos? No hay cálculo económico que pueda determinarlo”.
Sobre la dificultad para acumular reservas, explicó que emitir dinero sin respaldo genera presión inflacionaria si la demanda de pesos no aumenta. “Si vos emitís pesos y la gente no los quiere, se te va a precios o al tipo de cambio”, señaló, aunque admitió que existe un mecanismo alternativo: vender bonos en cartera del Banco Central para comprar dólares. Sin embargo, advirtió: “Cuando sale a vender bonos, baja el precio y sube el riesgo país”.
Cachanosky también se refirió al uso del tipo de cambio como ancla antiinflacionaria en la previa electoral. “La baja de la inflación se explica en gran medida porque se pisa el tipo de cambio”, expresó. Pero sostuvo que el Índice de Precios al Consumidor no refleja correctamente la realidad, ya que se construye con una estructura de consumo desactualizada: “El IPC de 2004 no sirve para analizar lo que pasa hoy”.
Respecto del EMAE y otros indicadores oficiales, cuestionó la calidad de los datos y las correcciones realizadas por el INDEC. “Si me das un dato de hace dos meses y después lo corregís porque está todo mal, no me sirve de nada”, dijo, al tiempo que advirtió que la baja estimada de la pobreza podría estar sobreestimada por falencias metodológicas.
