Carlos Fara: “La política argentina está cada vez más polarizada y tendiente al conflicto”
El analista político evaluó el clima en el Congreso, el avance del oficialismo tras las elecciones, la crisis del peronismo y el rol que pueden jugar los gobernadores en las negociaciones con el Gobierno.

(CNN Radio Argentina) — Carlos Fara, analista político, analizó en Regreso CNN el estado de la política argentina tras las elecciones y el reciente movimiento legislativo que dejó a La Libertad Avanza como primera minoría en Diputados. Según sostuvo, la dinámica actual muestra “una política cada vez más polarizada” y con actores que “comparten menos códigos y son mucho más tendientes al conflicto”.
Fara señaló que lo ocurrido en el Congreso, con tensiones entre oficialismo y oposición, forma parte de un clima político que se replica en otros países: “Hay mucha tentación de convertir estas situaciones en material para redes sociales, más allá del diálogo político que podría existir paralelamente”. Respecto de la ovación a Milei en el recinto, consideró que fue “un evento más del carácter disruptivo e inédito del presidente” y que era esperable en el marco de la celebración por la nueva primera minoría legislativa.
Al evaluar el reacomodamiento de fuerzas en Diputados, sostuvo que el escenario se está configurando “a favor del gobierno”, ya que los bloques no alineados con Fuerza Patria “están conjugándose para establecer algún tipo de convivencia y negociación”. Fara aclaró que, aun con los 95 diputados asegurados, al Ejecutivo “le siguen faltando 34 para la mayoría”, y que el Presupuesto será el primer test decisivo: los llamados dialoguistas esperan cumplir acuerdos de obra pública y la restitución de fondos para la Ciudad. “Ahí vamos a ver cuánto margen de maniobra tiene el gobierno teniendo un objetivo exigente de superávit fiscal”, explicó.
Sobre la fuerte presencia de La Libertad Avanza en la Cámara, advirtió que, pese al clima festivo inicial, la gestión deberá mostrar resultados: “El espectáculo que vimos en el Congreso fue vergonzoso, de muy poco nivel. La sensación es que estamos en una estudiantina. Después se verá a la hora de la verdad”. Aun así, recordó que el Gobierno está obligado a avanzar con reformas comprometidas con Estados Unidos y el FMI.
Fara también evaluó la crisis del peronismo, al que definió como un movimiento en desintegración estructural: “El peronismo va camino a ser una confederación de movimientos populares provinciales más que un gran PJ nacional”. Según afirmó, la disputa interna, el conflicto en Buenos Aires y la falta de liderazgo muestran un deterioro profundo. “El peronismo, tal cual lo conocemos, no tiene retorno”, sostuvo, aunque aclaró que podría mutar hacia otra forma de representación de los sectores populares.
En ese marco, consideró que los gobernadores tienen incentivos para negociar con el Gobierno nacional: “No me caben dudas de que existe buena predisposición. Milei les ganó en varias provincias y además están con caída de coparticipación. Eso obliga a ser más disciplinados si necesitan ayuda financiera”. Fara destacó que el Ejecutivo podría moderar textos legislativos para conseguir ese respaldo.
El analista también se refirió al futuro del gabinete y descartó cambios importantes en el corto plazo. Solo prevé movimientos en “segundas o terceras líneas”, salvo que surja una crisis inesperada. Sobre el rol del PRO, afirmó que el partido está en una situación delicada: “Es una minoría deteriorada y con futuro incierto”, aunque subrayó que el Gobierno no puede descuidarlo ya que aún necesita apoyo legislativo adicional para aprobar reformas clave.
Finalmente, analizando la gobernabilidad, Fara consideró que el avance del oficialismo en Diputados es una ventaja pero también un desafío. “El gobierno está exigido por el contexto a sacar las reformas adelante. Cualquier cosa que se trabe le va a generar un problema”, concluyó.
